Andrea del Boca, en la cárcel

La conductora irá a entrevistar a madres en lugares difíciles. Viajará también al Impenetrable chaqueño.

Durante mis 39 años de carrera he entrado a muchos lugares impensados, pero nunca jamás, ni para una ficción, había estado en una cárcel. Una apenas se lo puede imaginar, por las películas que vio. Pero el sonido de las puertas que se destraban, y que vuelven a trabarse detrás tuyo; el encuentro con esas mujeres que no son menos madres que otras... todo fueron sensaciones muy fuertes y un gran aprendizaje". Andrea del Boca, actriz de toda la vida, ahora a cargo de la conducción de La mamá del año (Canal 13, a las 17), cuenta su experiencia a horas, apenas, de haber grabado en la Unidad Penitenciaria 31 de Ezeiza, las entrevistas que se verán el lunes en el programa.El ciclo de Endemol, que recoje testimonios de madres que pasan o pasaron por distintas dificultades en la tarea de llevar adelante una familia, dará un aire nuevo a su estilo. Además de las entrevistas en el estudio, junto a los panelistas, y el concurso por el cual el público vota periódicamente a cuál historia de vida premiar, Del Boca hará notas en exteriores, en varios lugares del país. La semana próxima, por ejemplo, viajará a una comunidad toba en el Chaco, y luego irá hasta el Impenetrable, donde los problemas del embarazo y la niñez pasan por el Mal de Chagas y la desnutrición.En Ezeiza, penal federal que recibe a reclusas de todo el país embarazadas o con hijos hasta los 4 años (con quienes pueden convivir), del Boca se mostró sorprendida por "el orden y la contención respecto del ejercicio de la maternidad". "Más allá de las situaciones particulares -sostuvo, en charla con Clarín-, el sentimiento es el mismo para todas: el de dar todo por tu hijo, incluso dejando de lado el orgullo, el amor propio, y a veces, equivocándose mucho". Sobre el rating, que se muestra esquivo para el ciclo (5,1 puntos el jueves, según Ibope), Andrea apunta que le importa más la tarea solidaria y de concientización que intenta el programa, y que, de todos modos, imponer un formato "es una tarea que lleva su tiempo"."No me creo una periodista, para nada. Pregunto porque soy curiosa y me gustan los desafíos", dice. Claro que, más allá del costado profesional, reconoce un aporte a nivel humano: "Hay una cantidad de cosas que una no valora y sin embargo, como me dijo una chica, ¿sabés lo que es no poder mostrarle la luna a tu hija más que entre las rejas?".

Clarín